martes, 7 de febrero de 2012

El puñetero cartel del Festival...

ASÍ, RÁPIDO Y POR ENCIMA, "PA" NO ABURRIRLES...


   Éste de aquí arriba es el cartel oficial del Festival de Cine de Las Palmas. 
¿Les gusta?... sí, no, me encanta, vaya porquería, es genial...


   Eso es lo que tienen las opiniones, que hay tantas como personas en el mundo.


   Lo cierto es que se ha levantado cierto revuelo con la elección del cartel, sobre todo en ese mundo surrealista que es la red, donde es fácil cagarse en la madre de los otros escondido tras un cobarde seudónimo.


¿Qué? ¿Que a qué viene esto?
   Pues resulta que un amigo mío formó parte del jurado que designó ganador al cartel de marras, y que, ante la avalancha de críticas y acusaciones de tongo, se le ocurrió escribir en su blog personal un comentario acerca de cómo se desarrolló el proceso de elección.


¡Y pa qué fue aquello!
   Los insultos y descalificaciones, las acusaciones que antes flotaban en el aire virtual sin encontrar a nadie concreto a quién dirigirse, tuvieron de pronto una diana voluntaria donde clavarse.


   Ya no se trataba de insinuaciones vedadas, ni de dudas generales, sino ya de ataques personales teledirigidos.


   Ni que decir tiene que mi amigo firmaba sus opiniones con su nombre y apellido, y los insultos venían precedidos de alias poco imaginativos. Es lo que tiene internet, que apesta de tantos cobardes que se refugian en él.


   Y yo no sé, porque no estaba allí, si hubo tongo o no hubo tongo. Pero lo que sí sé, es que creo en lo que mi amigo dice en su blog. Y si él dice que la elección fue trasparente, al menos hasta donde él percibió, es que fue así.


   Sí, ya sé, ya sé... algunos saldrán aquí ahora a decirme que yo defiendo a mi amigo porque es mi amigo. Sinceramente, entre tú y yo, me chupa un pié lo que me digan. 


   Pero no les falta razón en una cosa. ¿Lo defiendo porque es mi amigo? Es que precisamente por eso sé que lo que dice es verdad, porque le he visto con estos ojitos que se ha de comer la tierra, rechazar favoritismos hacia su persona, enemigo natural y visceral de todo aquello que apeste a chanchullo. 


Porque, al fin y al cabo ¿que es lo que ha hecho? Escribir al día siguiente en su blog como se desarrolló la sesión de deliberación. ¿Eso es malo?
 Joder, ojalá todos los jurados lo hicieran, ojalá los comités de selección de los cortos, las deliberaciones de los jurados de los festivales, las comisiones para otorgar ayudas públicas...joder, ojalá se grabaran en video y se proyectaran junto con el corto ganador en la gala de clausura.


   Así, el limpio quedaría libre de la acusación de suciedad, y el sucio no podría presumir de limpieza.


   En fin, Pilarín...