viernes, 23 de noviembre de 2012

Instinto de generación


NADIE HABLARÁ DE NOSOTROS CUANDO ESTEMOS MUERTOS

                               De Izq. a Derch: Marta Viera, Iván López, Lamberto Guerra
                               Naira Gómez, Mery Díaz, Ado Santana, Daniel L. Lacave,
                               Maykol Hernández, Josep Vilageliu, Domingo de Luis y
                               Armando Ravelo

   Hace un par de días, el cineasta Iván López subió a su cada vez más imprescindible blog un interesante post titulado "conciencia de generación"
   La entrada en cuestión es, entre otras cosas, una reflexión personal sobre la generación actual de cineastas canarios y su actitud a la hora de interactuar con la situación del cine canario, o cine en Canarias... o lo que sea.

"Conciencia de generación"... ¿conciencia o "consciencia"? Conciencia es una palabra con mucho contenido. 

Iván nos dice textualmente:

"Todos estamos conformes en que Canarias cuenta con una de las mejores generaciones de cineastas de su historia. Una generación que ha nacido al regazo del cine digital. Pero si  quizás  nos dejáramos de mirar tanto al ombligo y propusiéramos  unirnos realmente, algo podría cambiar. En todos estos años me he dado cuenta que muchos realizadores no se interesan en absoluto por las obras de sus compañeros. Cada uno interesado en hacer  la guerra por su parte y sin mostrar ningún interés en conocer lo que hacen sus contemporáneos."

   Cuando hace referencia a esa conciencia de ser generación, creo entender que Iván nos habla de "como deberían ser las cosas", y no de "como son realmente".

   Por eso he titulado este post "instinto de generación", porque no creo que realmente exista en nosotros esa conciencia de formar parte de una generación de cineastas canarios, ya que en esta extraña colmena que formamos, nos atrincheramos absurdamente a veces en nuestras celdillas hexagonales y de ahí no nos saca ni Dios, pero, a cambio, si que soy capaz de distinguir cierto instinto de abeja, laboriosa, que a pesar de encargarse solamente de su parcela de miel y polen, "siente" que está interactuando con el resto de la comunidad.

   Y eso es bueno, creo yo.
Supongo que nadie es consciente de que perteneció a una generación artística hasta que años después viene un historiador y le etiqueta en sus crónicas.

Pero hablemos claro. No somos la "Nouvelle vague". Nadie nos recordará. ¿o que creen que rezarán los libros de historia del cine canario cuando hablen de esta época?
Fresnadillo, Elio Quiroga, quizás algo sobre Pérez Toledo o no...

   Hubo una generación anterior a la nuestra, que lo tuvo más dificil. Una generación de celuloide chico, de super8, de moviolas... ¿alguien recuerda sus nombres, más allá de los que tuvieron la suerte de llegar a algún sitio?

   Somos abejas que nos hemos multiplicado al calor de una revolución digital, que ya pueden ir recopilando de sus discos duros todos sus trabajos, metiéndolos en un dvd y llevándolos a la Filmoteca canaria para que cojan polvo en la estanterias institucionales.

Nadie hablará de nosotros cuando estemos muertos.
Bueno, da igual, si en el fondo sólo he escrito este post como excusa para poder poner la foto de inicio...
¿A que es cojonuda?... la foto de arriba, digo...